El mercado binacional que se celebra los lunes y viernes fracasó ayer nuevamente, luego de que cientos de compradores y vendedores haitianos fueron impedidos por la Policía de su país a ingresar a este territorio a realizar negocios con los dominicanos.
Sin embargo, al mediodía se permitió la entrada de los haitianos que aún pernoctaban en la zona circundante al río Masacre que separa a Ounaminthe de Dajabón, pero comerciantes de ambos países dijeron que las ventas fueron lentas.
Medios locales publicaron detalles de una comunicación que había enviado el pasado sábado la cancillería haitiana a las autoridades provinciales de Dajabón en la que aclaraba que sólo autorizó la celebración del comercio en el nuevo mercado que construye la Comunidad Europea por el día del viernes, según dijo la gobernadora Esther Ramírez. Ayer decenas de vendedores dominicanos acudieron al área que se habilitó en el nuevo mercado que construye la Comunidad Europea, pero los haitianos no cruzaron.
La Policía de Haití tuvo que emplear en ocasiones medidas de fuerza para poder dispersar a los haitianos que se aglomeraron en la cercanía del puente en las primeras horas de la mañana de ayer.
Temprano pocos haitianos lograron entrar al mercado binacional, pero a otros, no fue sino hasta después del mediodía que la Policía de su país les permitió el ingreso para que vendieran algunas mercancías y luego compraran en el mercado, pero el flujo comercial no se pareció en nada a los días normales del comercio que se celebraba en el centro del pueblo.
Fue notoria la ausencia de autoridades dominicanas en el mercado y sólo se observaron a militares, inspectores de Aduanas y de Migración.
El viernes tres haitianos, entre ellos dos mujeres y un adolescente resultaron heridos al ser pisoteados por una multitud que se apresuró a entrar al mercado cuando los militares dominicanos abrieron el portón fronterizo.
PROHIBEN LA VENTA DE ROPAS USADAS EN PACAS
República Dominicana prohibió ayer el comercio de ropa usada en la frontera con Haití para evitar la propagación del cólera que ha causado cerca de 1,000 muertes en ese país.
La ropa usada en pacas provenientes de Estados Unidos, así como los zapatos donados por Canadá y la Unión Europea representan los principales productos que venden los comerciantes haitianos en los mercados fronterizos que se realizan dos veces a la semana.
Tras su ingreso a República Dominicana, la ropa usada es comercializada en mercados de pulgas así como en pequeñas tiendas en todo el país.
Sin embargo, al mediodía se permitió la entrada de los haitianos que aún pernoctaban en la zona circundante al río Masacre que separa a Ounaminthe de Dajabón, pero comerciantes de ambos países dijeron que las ventas fueron lentas.
Medios locales publicaron detalles de una comunicación que había enviado el pasado sábado la cancillería haitiana a las autoridades provinciales de Dajabón en la que aclaraba que sólo autorizó la celebración del comercio en el nuevo mercado que construye la Comunidad Europea por el día del viernes, según dijo la gobernadora Esther Ramírez. Ayer decenas de vendedores dominicanos acudieron al área que se habilitó en el nuevo mercado que construye la Comunidad Europea, pero los haitianos no cruzaron.
La Policía de Haití tuvo que emplear en ocasiones medidas de fuerza para poder dispersar a los haitianos que se aglomeraron en la cercanía del puente en las primeras horas de la mañana de ayer.
Temprano pocos haitianos lograron entrar al mercado binacional, pero a otros, no fue sino hasta después del mediodía que la Policía de su país les permitió el ingreso para que vendieran algunas mercancías y luego compraran en el mercado, pero el flujo comercial no se pareció en nada a los días normales del comercio que se celebraba en el centro del pueblo.
Fue notoria la ausencia de autoridades dominicanas en el mercado y sólo se observaron a militares, inspectores de Aduanas y de Migración.
El viernes tres haitianos, entre ellos dos mujeres y un adolescente resultaron heridos al ser pisoteados por una multitud que se apresuró a entrar al mercado cuando los militares dominicanos abrieron el portón fronterizo.
PROHIBEN LA VENTA DE ROPAS USADAS EN PACAS
República Dominicana prohibió ayer el comercio de ropa usada en la frontera con Haití para evitar la propagación del cólera que ha causado cerca de 1,000 muertes en ese país.
La ropa usada en pacas provenientes de Estados Unidos, así como los zapatos donados por Canadá y la Unión Europea representan los principales productos que venden los comerciantes haitianos en los mercados fronterizos que se realizan dos veces a la semana.
Tras su ingreso a República Dominicana, la ropa usada es comercializada en mercados de pulgas así como en pequeñas tiendas en todo el país.