El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez dijo que al presidente Danilo Medina no es fácil la tarea que le espera, por los problemas que tiene el país, porque los recursos con los que cuenta no son suficientes y porque, además, heredó compromisos que limitan seriamente el ejercicio de su gobierno.
Sin embargo, dijo esperar que medina cumpla con el plan de gobierno que prometió durante la campaña.
Al oficiar el Tedeum en la Catedral Primada de América, López Rodríguez dijo que considera urgente que el presidente le dé prioridad a algunos puntos como: garantizar una buena educación, capacitación a los maestros y un salario justo para éstos.
También le instó a combatir sin tregua la pobreza, con ayuda de varios sectores, “garantizando cierta dignidad a las personas envejecientes, capacitando e incorporando a muchas más personas al campo laboral”.
Dijo que Medina, en su discurso en la Asamblea Nacional, tocó algunos de estos puntos, como hacer un esfuerzo sostenido para devolver la seguridad a la ciudadanía, que se siente desprotegida ante una criminalidad desafiante e intolerante.
Otro aspecto que debe ser prioritario, según López Rodríguez, en el nuevo gobierno, es enfrentar con decisión “el gravísimo problema de suministro de energía eléctrica que por década nos ha agobiado”.
También instó al nuevo gobierno a dar un estricto cumplimiento a la ley, fortalecimiento de la institucionalidad, para la vida en democracia y tolerancia cero con la corrupción en cualquiera de sus manifestaciones, tal y como anunció Medina al ser juramentado como presidente de la República.
López Rodríguez instó al gobierno a garantizarle seguridad social a toda la ciudadanía mejorando notablemente la que hoy tenemos.
El presidente Danilo Medina llegó a la Catedral Primada de América a las 2:20 minutos acompañado de su esposa, Candy Montilla, y la vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández.
Tras saludar a varios asistentes, subieron al previsterio, donde se les habían colocados asientos especiales, y de inmediato el coro de la catedral inició la ceremonia.
Además del cardenal López Rodríguez, el Tedeum fue concelebrado por el nuncio apostólico Józef Wesolowski; el enviado especial del Papa a la ceremonia de traspaso de mando, y los obispos auxiliares Francisco José Arnaiz y Víctor Masalles.
Asistieron, también, embajadores y miembros del cuerpo diplomático acreditado en el país, así como funcionarios que fueron designados mediante decretos por el mandatario este mediodía.
